LOS PIPITOS unimos esfuerzos con la Fundación para la Autonomía y Desarrollo de la Costa Atlántica de Nicaragua (Fadcanic) y la Federación del Comité Paralímpico Nicaragüense (Fedcopan), con la colaboración del organismo Eirene Suisse, para desarrollar un taller de capacitación sobre deporte adaptado, en la Costa caribe de Nicaragua.
La capacitación, desarrollada en Laguna de perlas, contó con la participación de 16 instructores de educación física del Caribe norte y sur, el responsable de deporte de Los Pipitos, y el facilitamiento de Tamara Strasser, cooperante suiza especialista en deporte adaptado, quien actualmente trabaja con LOS PIPITOS.
El taller, cuya duración fue de 4 días, fue amplio y completo. Se trabajó las siguientes temáticas: metodología de la inclusión deportiva, contexto deportivo internacional y nacional por los atletas con discapacidades, y deporte adaptado en las disciplinas: Goalball, Boccia, voleibol sentado, futbol5
La semana se concluyó con una actividad recreativa con los jóvenes de los Pipitos de la región., coordinado por Ligia Peralta, responsable de Los Pipitos en Laguna de Perla y Martín Jackson, responsable de deporte de FADCANIC.
La actividad final con jóvenes con discapacidad, permitió a los participantes al taller, poner en práctica los conocimientos adquiridos.
Disciplinas deportivas adaptadas.
El deporte mejora la condición física (resistencia, velocidad, fuerza, movilidad), mejora la coordinación (orientación, equilibrio, reacción, percepción, adaptación, ritmo), previene las enfermedades por falta de movilidad y favorece la seguridad y flexibilidad de la persona con discapacidad en su vida cotidiana.
Pero ¿cuáles son los deportes adaptados? ¿De qué estamos hablando?
Aquí una explicación de cada uno de ellos.
Goalball
El goalball es el único deporte creado específicamente para personas ciegas o con baja visión. Participan dos equipos de 3 jugadores. El juego se basa principalmente en el sentido auditivo para detectar la trayectoria de la pelota, la cual lleva en su interior cascabeles que suenan al movimiento del balón; por lo que este deporte requiere una gran capacidad de orientación espacial para poder interceptar el balón, situarse estratégicamente en el campo y realizar el lanzamiento. Un dato a destacar es que todos los jugadores llevan antifaces opacos para igualar la falta de visibilidad de los participantes. En algunas competiciones los jugadores además del antifaz deberán usar parches oclusivos.
Boccia
Boccia es un juego diseñado para personas con diversidad funcional, inspirado en el juego de origen italiano bocce o bochas, de donde toma su nombre, y aceptado como deporte paralímpico desde 1984. Inicialmente jugado solo por deportistas con parálisis cerebral, actualmente puede ser jugado por deportistas en sillas de ruedas con discapacidades totales o parciales en sus extremidades. Se utilizan cuatro clasificaciones a fin de garantizar la paridad entre los competidores (BC1, BC2, BC3 y BC4). Se juega en competencias individuales (BC1 a BC4), por parejas (B C3 y BC4) o en equipos de tres jugadores (BC1-BC2). En todas las pruebas pueden participar hombres o mujeres, indistintamente.
Voleibol Sentado
El Voleibol sentado es una variante de voleibol para atletas en situación de discapacidad. Su vistosidad y consiguiente popularidad es comparable con las del voleibol y el vóley playa.
El juego y la técnica es la misma que la de voleibol, solo en los aspectos relativos a la movilidad de los jugadores:
- Los jugadores que conforman el equipo deben de tener grados de discapacidad mínimos.
- Los jugadores tienen que permanecer sentados, manteniendo la pelvis en contacto con el suelo, y la elevación en el momento de jugar el balón es falta.
- El campo y las distintas zonas
coinciden con las de voleibol, solo por sus dimensiones:
- 10 m de largo y 6 m de ancho.
- La línea de ataque se adelanta a 2 m de la red.
- La altura de la red es menor: 1,15 para hombres y 1,05 mujeres.
Fútbol 5
El Fútbol 5 adaptado es una práctica deportiva que constituye una modalidad del fútbol para personas amblíopes (afectación de ojos) y no videntes, en el que participan también personas videntes. Se utiliza una pelota sonora y cada equipo se integra con cuatro personas ciegas o con disminución visual severa —que deben jugar con cubreojos— y un portero vidente que también debe orientar a los jugadores no videntes, completándose con un “llamador” ubicado detrás del arco contrario y las indicaciones orientativas del director técnico. Se aplican las reglas de la FIFA, con las adaptaciones establecidas por la IBSA (Federación Internacional de Deportes para Ciegos). Se utilizan tres clasificaciones para garantizar la paridad entre los competidores (B1, B2 y B3).